El abogado (que se creía conseller en cap)
Primavera/Verano de 2019 “Hummmmm, miércoles…” Voy caminando lentamente -es por la mañana y no hace mucho que emergí- por la acera de una arteria colindante al río que vio como la faraónica sede de su partido pasaba a mejor vida, sustituida por un hotel en construcción cuyos huéspedes albergarán seguramente menos intrigas y secretos inconfesables que las sucesivas direcciones del PSPV . Medio dormido, la percepción de un movimiento brusco delata una presencia a mi izquierda y me hace levantar los ojos del suelo mientras voy caminando. Él acaba de dar un giro vivaz, repentino, propio de un personaje agitado, de una suerte de Louis de Funés . Un giro, a la vez que una flexión que viene a marcar una acentuada combadura, conformando un ángulo recto casi perfecto entre piernas y pelvis. Una postura exagerada con la cual la posición de su tronco permite una mirada muy cercana a un cartel. Una mirada digna de