45, y llegué ;-)

 Así que aquí estoy, consciente de haber llegado a los 45 años. Y es que no acabaron conmigo, los de la secta de mierda de tu madre, la del gurú encarcelado por pederasta.

Un hecho que no mencioné en mis artículos en los que evoco, a veces brevemente y otras adentrándome más en la "comunidad" de tu progenitora, es que el baterista de una banda de rock muy popular en la Argentina se había refugiado allí antes de su juicio por el asesinato de su mujer. Cosas.

Una banda de la que sus otros miembros también fueron encarcelados... Tras un concierto que salió -realmente- mal. 

Por las calles de Córdoba se observaban numerosos grafitis reclamando su libertad. El incendio que causó aquel horror estaba envuelto en polémicas jurídico/administrativo/mafiosas y muchos les creían inocentes. En cuanto al batería es otra cosa. 

Otra estrella argentina, Claudio María Domínguez, cuya ex-esposa me parece sigue metida la secta en Catamarca, estaba ligada al demasiado famoso "maestro amor". El escrache que el admirable y valiente Pablo Salum organizó en contra suya participará más tarde del encarcelamiento del gurú pedocriminal. Por otra parte el tipo sigue emitiendo su basura barata a primera hora de la mañana en C5N, un canal argentino de gran audiencia. Un canal progubernamental, cosa que no tiene nada de malo, sobre todo viendo la pinta de la oposición, pero podrían prescindir allí del tipo cómplice de pedófilos que aparece para el desayuno con sus desvaríos sobre el karma y todo eso.

Bueno, creo que estamos a punto de terminar tú y yo con las sectas (las organizaciones coercitivas #sectas, hola Pablo ;-)), al menos en lo que a nosotros dos se refiere. 

Si no nos hubieran pasado tantas cosas no sentiría la necesidad de decirte aquí que te quiero. Sobre todo porque nos vimos ayer y que, a pesar de tener dieciocho añitos ya, has sido bastante cariñoso. Gracias por tus recomendaciones sobre mi postura frente al ordenata (otro día cuento el "arreglo" que me hicieron en Catamarca del portátil que traía entonces ;-)), tus clases de masajes no fueron en vano y acabo de reposicionarme correctamente en la silla. Gracias por tu información ya más creíble sobre tu quehacer de chaval con toda la vida por delante.

Gracias por todo, hijo mío, por tu madurez, por tu comprensión de las situaciones mucho más allá de lo que estaba en derecho a esperar de un niño, en medio de todas estas aventuras. Todo mi mérito, y lo tengo, es tuyo. Como te explicaba, nunca nos compensarán los años que nos quitaron, pero nuestras vacaciones de Córdoba de julio de 2013 fueron tan geniales como geniales fueron absolutamente todos los momentos del 2014 que compartimos. Todos esos días en los que conseguía arrancarte a la secta fueron especialmente felices. Y en cuanto estuvimos sentados uno al lado del otro dentro de ese avión en aquella pista del aeropuerto de Ezeiza, supe que habíamos tomado la decisión correcta. Juntos, lo habíamos logrado.